MORENA en pañales

Esta entrada no trata sobre alguna preciosa mexicana de piel obscura que ande en paños menores, sino de algo que puede terminar afectando a todo México.

El partido MORENA (Movimiento de Regeneración Nacional) fundado por Andrés Manuel López Obrador es en estos momentos como un recién nacido, cuyos integrantes que en su mayoría nunca antes habían accedido a las redes del poder están flotando en aguas infestadas de tiburones, rodeados por políticos de otros partidos (PRI, PAN) que se han ido maleando gradualemtne con el paso de los años y los cuales tratarán de sacar el mayor provecho posible de la indefensión del recién nacido. MORENA, tras su triunfo avasallador del año pasado al cual indudablemente contribuyó el hartazgo de la gente hacia el PRIAN, corre el mismo riesgo de que ver que a su interior se repitan los eventos que pudrieron al PAN desde su auge inesperado en la década de los ochentas carcomiéndole sus intestinos y convirtiéndolo en un partido por demás mediocre, tan corrupto como el PRI (o quizá más, porque a las malas artes y prácticas sucias que aprendió en poco tiempo del PRI les sumó las suyas propias convirtiéndose en algo peor muy lejano a la esperanza que alguna vez represento para los neopanistas que creyeron en él).

El partido MORENA está siendo rodeado por gente maleada fermentada en lo peor que se practica en la política de México. Allá por la década de los ochentas, los que apoyaban al PAN eran en su mayor parte idealistas que estaban siendo convencidos por las diatribas y los discursos de los entonces líderes del PAN (Francisco Barrio, Javier Corral, Gustavo Elizondo, Ramón Galindo, etc.) de que para acabar de una vez por todas y de tajo con la corrupción en la que el PRI había sumido al país bajo los gobiernos perversos de tipos como José López Portillo, Miguel de la Madrid Hurtado, Luis Echeverría Alvarez y otros igualmente nefastos, era necesario expulsar al PRI de la silla presidencial para estrenar una nueva y gloriosa época en México con un gran CAMBIO. La palabra cambio fue el gancho con el cual en el 2000 el PAN logró algo que el fundador Manuel Gómez Morín hubiera creído imposible, arrebatarle al PRI la silla presidencial de manera pacífica mediante los votos en las urnas.

Cuando el PAN empezó a gobernar a México desde la mansión oficial de Los Pinos, todos los mexicanos esperaban que se empezara a llevar el prometido CAMBIO. Pero en vez de darse el GRAN CAMBIO, todo permaneció igual. El PAN asimiló casi de inmediato todas las mañas y corruptelas del PRI a las cuales les sumó las suyas propias. Ante el colapso del PRI, hubo tránsfugas del viejo PRI que se empezaron a pasar al PAN en las creencias de que los tiempos del PRI llegaban a su fin y que sus futuros políticos estarían dentro del partido político de moda. El PAN les abrió sus puertas de par en par a estos tránsfugas priistas sin ponerse a pensar que al admitirlos ellos infestarían de inmediato al PAN con las mismas mañas y corruptelas y trampas que habían terminado anquilosando al PRI. Y el PAN terminó convirtiéndose en una calca del PRI. Los panistas que antes tanto habían denunciado al PRI terminaron haciéndose muy buenos amigos de priistas de todo cuño, hasta los de mala reputación como Carlos Salinas de Gortari. Como consecuencia lógica, el tan mentado CAMBIO nunca se dió, y la cosa siguió igual que antes, la única diferencia fue la formación de una especie de entendimiento entre los antes dos grandes adversarios conocida como el PRIAN (en ese entonces la izquierda no contaba ya que su peso electoral en las urnas, fuera de la Ciudad de México, era mínimo). Fue la misma gata, nomás que revolcada.

El hartazgo del pueblo ante la conformación del PRIAN fue aprovechado hábilmente por el político representante de la izquierda mexicana, Andrés Manuel López Obrador, para "comerle el mandado" tanto al PRI como al PAN, arrebatándole al PAN el poder en las elecciones presidenciales de 2018. Y a diferencia de lo que ocurrió (o mejor dicho, no ocurrió) cuando el PAN ascendió por vez primera en su historia a la silla presidencial en el 2000, López Obrador empezó a instituír cambios radicales que enviaron el mensaje de que su gobierno no sería una simple continuación de los corruptos sexenios anteriores de PRI y PAN. Los cambios que empezó a llevar a cabo permitieron contrastar en su incipiente gobierno las cosas que pudo haber hecho el PAN y nunca hizo.

De seguro teniendo en mente la putrefacción que carcomió las entrañas del PAN cuando después de sus inesperados triunfos empezó a admitir dentro de sus filas de militantes a priistas de la vieja escuela, todos esos priistas tránsfugas por demás maleados y sin lealtad a nadie más que a ellos mismos, en agosto de 2018 Yeidckol Polevnsky Gurwitz, la dirigente nacional de Morena, afirmó que se había detectado una “afiliación masiva” al partido, por lo que se había determinado bloquear el registro de nuevos militantes y evitar personas “con otros intereses”, agregando que se había fortalecido el filtro de ingreso porque no querían infiltrados (del PRI y del PAN, o sea del PRIAN), confirmando el cierre del padrón del partido cerrándole de este modo las puertas a oportunistas y arribistas carentes de ideología que solo estaban buscando sacar provecho propio (tal vez esto deberían haber hecho los panistas de la década de los ochentas cuando tras el auge inesperado del PAN propiciado por el hartazgo ciudadano ante los malos gobiernos priistas que hundieron al peso con las peores devaluaciones en la historia, hubo una afiliación masiva de ex priistas que de ser "los más leales a la doctrina del PRI" pasaron de la noche a la mañana a ser "los más grandes admiradores de los principios doctrinarios del PAN").

A veces parece que la historia se repite, y abundan quienes son incapaces de aprender y asimilar las lecciones del pasado para evitar caer en los mismos errores. Mucho se le ha cuestionado a Adán que por su pecado original todos sus descendientes pese a que no incurrieron en dicho pecado tuvieran que cargar también con el peso y las consecuencias de la culpa, pero Adán desde dondequiera que se encuentre (¿el Infierno?) podría decirle individualmente a muchos de sus descendientes actuales: "¿Y a tí que te hace pensar que eres mejor que yo? ¿en base a qué crees que tú no habrías caído como YO caí?, ¿acaso te crees tan perfecto?, ¡ya te llegará tu turno y tu hora de ser probado, y entonces sí veremos si realmente eres mejor que yo!"

Lo que tanto temían en MORENA, que se les sucediera lo mismo que lo que le sucedió al PAN ya en el poder al incrementar sus contactos y sus "migas" con gente del PRI incorporando a muchos de ellos y asimilando sus mañas y trapacerías, parece que ya ha empezado a sucederle a MORENA. En este día 5 de abril de 2019 apareció publicada la siguiente fotografía:

junto con el siguiente texto que resalta los conflictos de interés que ya se están dando al interior de MORENA en la frontera norte de México:

El análisis de la foto es una caja de Pandora
En medio de Armando Cabada y de Juan Carlos Loera aparece el gobernador del estado, Javier Corral Jurado, cuya valentía o cinismo para presentarse ante semejantes auditorios no tiene comparación


Los inaplazables tiempos políticos sucesorios estatales 2021 nos obligan a detenernos en una foto que con alegría desbordante nos obsequiaron descollantes figuras fronterizas sincronizadas para aparecer juntos en el estadio Benito Juárez y sacarse la lotería emocional con el contundente 2-0 de Bravos contra los chilangos Pumas. Ahora tendremos una final de esas que los comentaristas deportivos definen como de alarido.

La foto en mención la tenemos en la versión digital de La Columna aunque desde la misma noche del miércoles fue circulada por amigos y enemigos de quienes ahí aparecen. Fue convertida en memes, reclamos, enojos, señalamientos, críticas ácidas, aplausos, de todo...

Pero faltó el análisis profundo, objetivo, y ese lo tenemos aquí.

En medio de Armando Cabada y de Juan Carlos Loera aparece el gobernador del estado, Javier Corral Jurado, cuya valentía o cinismo para presentarse ante semejantes auditorios no tiene comparación. Alcanza un 28 por ciento en la encuesta que mejor le califica;

https://www.eldiariodechihuahua.mx/estado/corral-en-el-lugar-29-en-mal-gobierno-20190404-1498396/

apenas un 12 en la peor. Mal gobierno le gritan mayorías inmensas de chihuahuenses; pésimo, le señalan otras. Él ni se inmuta. Ya endureció la concha.

Esa imagen habla de que ha mejorado sustancialmente la relación entre el independiente alcalde Cabada y el gobernador.

Debemos entender que a la restablecida comunicación institucional, administrativa, se suma la afinidad político-electoral. No olvidemos que el inicio de regímenes entre ambos fue más allá de lo agreste, alcanzó lo agresivo. Ahora es miel sobre hojuelas.

Los panistas opositores al gobernador verán con gran recelo esa fotografía aunque ellos son mayoría al interior del blanquiazul; y a diferencia de Corral, son esos hijos de Gómez Morín los que gozan de tanta fortaleza y aceptación popular que las encuestas los colocan en los cuernos de la luna rumbo a la gubernatura.

Hablamos de Maru Campos Galván, alcaldesa de Chihuahua, y su equipo. Sus números indican gran competencia entre su abanderada, justo el alcalde juarense, y el senador morenista, Cruz Pérez Cuéllar.

El caso de Loera de la Rosa es también muy especial en esa imagen. Adquiere gran relevancia porque es el cuatito y representante de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en Chihuahua.

Aquí el recelo y la crítica provino pero de las filas de Morena. Ven desde las entrañas de ese partido a Juan Carlos con cara y rostro de los votos que les hicieron falta para que ganara su candidato a la alcaldía, Javier González Mocken. La división es irreconciliable.

¿Cuál será la jugada de los tres entre ellos mismos? Corral no puede apoyar a Cabada y a Loera al mismo tiempo. Loera busca la gubernatura igual que Cabada. Los panistas no concederán la nominación para que sea regalada por Corral a cualquiera de sus menguados adeptos (Madero o cualquier otro) y por lo tanto no apoyarán ni a Loera ni a Cabada. Su portabandera es Maru y nadie más.

Entre Cabada y Corral han existido altibajos en su relación pero no entre Loera y Cabada ni entre Loera y Corral, por lo tanto deberán decidir pronto sobre el rumbo que tomarán. Si no lo definen ellos las propias circunstancias los obligarán a hacerlo. Otro dato: Loera es amigo público de Armando y de Corral pero su cuatito AMLO no; para nada. ¿Entonces?

También aparecen en la foto dos rellenitos militares; el subsecretario estatal en Juárez, Mario Dena. Igualmente la vicegobernadora, Lety Corral, junto a los dos únicos operadores fieles que le quedan en esta frontera, los regidores Enrique “Quique” Torres y Amparo Beltrán.

La desfachatez con la cual el representante personal del presidente López Obrador se exhibe en la fotografía con el gobernador de Chihuahua es inconcebible tomando en cuenta de que se trata de un gobernador que de acuerdo a las encuestas (lo reitera la nota) arrastra los peores índices de popularidad en la historia del estado además de ser un tipo cuyos delirios de grandeza rayanos en la locura forman parte de su irrefrenable e  inocultable obsesión de querer convertirse en presidente de México a como de lugar. Y es un político cuyo revanchismo lo ha llevado a dedicar gran parte de su tiempo para tratar de consumar venganzas personales abusando de su poder como gobernador aunque tales venganzas se caigan al suelo por lo enclenque de las acusaciones o simplemente por falta de pruebas.

El representante de AMLO en Chihuahua y líder de MORENA en Chihuahua debería haber hecho todo lo posible por desligarse del decadente gobernador Javier Corral en lugar de andarse exhibiendo a su lado presumiendo su cercanía, y tales desfigurios ocurrieron pese a que la misma dirigente nacional de MORENA Yeidckol Polevnsky ha denunciado en repetidas ocasiones al gobernador de Chihuahua, Javier Corral, y ella está perfectamente enterada de las desmedidas ambiciones políticas mesiánicas desmedidas de un desequilibrado entregado a sus excesos mundanos que está más interesado y ocupado en despilfarrar a manos llenas los limitados recursos del erario público para disfrutar la vida y promoverse a sí mismo que en gobernar a Chihuahua. Ella lo conoce bien y lo denuncia, pero lamentablemente la gente de MORENA en Chihuahua está siendo sido coptada y convencida cada vez más de apoyar al extranjero Javier Corral (no nació en México, es un ciudadano norteamericano nacido en los USA al que le da asco ondear la bandera de México). No han calado todavía en MORENA que las consecuencias de andarse exhibiendo sus líderes públicamente muy de la mano con uno de los gobernadores más corruptos en la historia de México puede traer costos y consecuencias a largo plazo como lo que le sucedió al cacique priista José Reyes Baeza Terrazas, ex gobernador de Chihuahua emanado del PRI que aspiraba a ser Senador por el voto directo, y el cual como respuesta a sus continuos acercamientos con Javier Corral Jurado terminó siendo repudiado hasta por las mismas bases priistas que le negaron el voto en las urnas en 2016 que podría haberlo llevado al Senado de la República, dándole así al PRI a una de sus peores derrotas en el nuevo milenio. El priista en desgracia José Reyes Baeza no recibió del ingrato gobernador de extracción panista Javier Corral absolutamente nada a cambio de los apoyos públicos que le estuvo dando Reyes Baeza, ni siquiera algún nombramiento así fuese simbólico en alguna dependencia gubernamental, lo cual era de esperarse porque Javier Corral ha sido igualmente ingrato con muchos otros que le han dado apoyos o que le han mostrado alguna simpatía, tales como el candidato del PRI Enrique Serrano en contra del cual contendió Javier Corral en 2016 por la gubernatura de Chihuahua. Fiel a su costumbre acusadora partiendo de calumnias sin pruebas, el político pendenciero Javier Corral emprendió en aquél 2016 una guerra sucia durísima en contra del PRI que todavía se recuerda en Chihuahua por su exacerbada dureza. Enrique Serrano y su tutor el entonces gobernador priista César Duarte no respondieron a la guerra sucia emprendida en contra del PRI de Chihuahua por Javier Corral pese a tener mucho material con el cual podrían haberle respondido duramente a Javier Corral no basádose en difamaciones y calumnias como lo hizo Javier Corral sino en hechos concretos relacionados con el actuar público de Javier Corral en la creencia ingenua (o quizá reflejando estupidez o una confianza excesiva soberbia en su seguridad de triunfo) de que el comportarse como un caballero con Javier Corral respetando al implacable agresor les traería algún agradecimiento de parte de Javier Corral, pero es el caso que no solo nunca les mostró agradecimiento alguno sino que desde que tomó posesión de su cargo como gobernador emprendió una cacería en contra de prominentes priistas con la deliberada intención de destruír al PRI recurriendo a la enclenque figura de los "testigos protegidos" (intimidados por la fiscalía del estado bajo órdenes de Javier Corral, a falta de pruebas concretas de las acusaciones fabricadas) y la cacería de brujas llegó a tal grado que hasta Enrique Peña Nieto pese a ser presidente de México se asustó tanto ante la posibilidad de que Javier Corral abusando de su poder como gobernador cometiera un dislate (tal como ordenar la aprehensión de Enrique Peña Nieto) orillando al presidente de México a tramitar un amparo para esquivar chicanerías y acciones legaloides de Javier Corral en contra de Peña Nieto y miembros prominentes de su gabinete, siendo la primera vez que ocurre algo como esto en la historia de México. Las cacerías corralistas en contra de priistas prominentes se han ido cayendo con el paso del tiempo por falta de pruebas en casos como el del priista Alejandro Gutiérrez La Coneja o del mismo ex gobernador César Duarte también por falta de pruebas (es mucho más fácil calumniar y difamar sin presentar prueba alguna que presentar pruebas concretas para sustentar cargos y acusaciones.) En realidad, la intensa campaña en contra del PRI y los priistas de mayor rango como el presidente Enrique Peña Nieto y Manlio Fabio Beltrones no tenía nada que ver con delito alguno que pudieran haber cometido, sino era parte de uno más de los muchos esfuerzos de Javier Corral por ganar fama mediática a nivel nacional y mantener una notoriedad y presencia en las noticias en su permanente precampaña en pos de la presidencia de México. El caso es que tanto César Duarte y Enrique Serrano como otros priistas alguna vez creyeron que compartiendo amistosamente espacios con panistas como Javier Corral obtendrían de él algún respeto, pero se equivocaron rotundamente y hoy están viviendo en carne propia las consecuencias de su error. Del mismo modo, si en Chihuahua (y el resto de México) los Morenistas cometen el error que cometieron los panistas de asimilar la corrupción del PRI maleándose y perdiendo sus ideales, el panorama no pinta muy optimista a largo plazo para el partido Morena, al menos en Chihuahua.

Un ejemplo claro de cómo a causa de su inexperiencia en el nada fácil arte de la política está desbarrando el partido MORENA tras su espectacular triunfo electoral en 2018, se tiene en la inclusión dentro de las filas de MORENA para las elecciones de la gubernatura de Puebla en 2019 de Lilia Merodio. Veamos primero lo que dice la siguiente nota publicada por LA COLUMNA DE EL DIARIO bajo el título Aparece Lilia Merodio en el surrealismo camotero publicado el 6 de abril de 2019:

En un episodio más del surrealismo de la Cuarta Transformación, la exsenadora priista Lilia Merodio fue designada integrante del equipo de campaña del candidato a gobernador de Puebla por Morena, Miguel Ángel Barbosa.

A finales de marzo la también excandidata derrotada a diputada federal en el pasado proceso electoral fue ingresada a la Coordinación de Vinculación con Organizaciones de la Sociedad Civil para fortalecer el proyecto de su compañero senador en la pasada Legislatura.

La priista –porque no ha renunciado al PRI– entró en un amplio grupo de tricolores, panistas y morenovallistas a ser parte del equipo de Barbosa Huerta, quien fue derrotado en la elección del año pasado por la esposa de Rafael Moreno Valle, Martha Ericka Alonso, víctima de una extraña fatalidad cuando apenas se estrenaba como gobernadora, junto con su marido exgobernador.

La incorporación de Lilia y de otros hizo ruido en los morenistas de Puebla, como si no se hubieran acostumbrado a todo tipo de dislates en esta nueva era política y a ese mundo alterno que es la cuna del huachicol.

Pero tampoco hay que espantarse.

El mismo candidato a gobernador de aquel estado viene de cuna priista, formación perredista y redención lopezobradorista.

La juarense es de cuna tricolor, hasta buscó la dirigencia estatal del PRI con ataques constantes a Omar Bazán, luego de que no pudo ser candidata a gobernadora; de consolación obtuvo la candidatura a diputada federal por el distrito 3 y perdió ante la abanderada de Morena, una total desconocida, Claudia Lastra Muñoz. Y lo demás ya es historia.

Lilia Merodio es una priista de la cual ya se había puesto algo aquí previamente dentro de esta bitácora el 24 de julio de 2018, actualmente con su carrera política en Chihuahua casi en ruinas en medio de un PRI prácticamente moribundo. Esta política de mala fama (que creció y terminó versada en todas las trapacerías y mañas desarrolladas por el PRI corrupto de los tiempos hegemónicos del partido único y la democracia simulada) le clavó el puñal por la espalda al pueblo de Chihuahua cuando dió su voto en contra de los chihuahuenses aprobando desde el Senado un aumento al impuesto IVA a los residentes fronterizos, cosa de la que el pueblo se acordó en 2018 cuando Lilia Merodio compitió para diputada federal y el pueblo de Chihuahua con el voto ciudadano le dió la espalda a Lilia Merodio destruyéndole en las urnas su carrera política a esta mujer que se quiso pasar de lista.

¿Acaso no tenía el partido MORENA de Puebla entre sus filas a militantes con mayores méritos que la priista Lilia Merodio como para pasarlos por alto y aceptar la intrusión de Lilia Merodio que seguramente les habrá ofrecido a los Morenistas de Puebla su "amplia experiencia y conocimientos en cuestiones de gobierno"? ¿Tan desesperados estaban los Morenistas de Puebla por recibir ayuda de políticos del PRI como una que llega precedida por su fama dentro de dicho partido político? Lo que se puede esperar es una deserción masiva de las filas de MORENA en Puebla ocasionada por muchos que quedarán decepcionados con esta maniobra trapera, LO MISMO QUE OCURRIO EN EL PRI DE CHIHUAHUA CUANDO EL CACIQUE PRIISTA JOSE REYES BAEZA SE ESTUVO EXHIBIENDO PUBLICAMENTE CON EL FEROZ ANTIPRIISTA JAVIER CORRAL JURADO. Además de la deserción de militantes, lo lógico es que los mismos priistas de Puebla aprovecharán esta pifia de MORENA para empezar a torpedear las aspiraciones de quienquiera que resulte ser el candidato de MORENA para la gubernatura de Puebla, y les puede terminar costando la gubernatura.

Y así como José Reyes Baeza y Lilia Merodio y los neopanistas tales como el corrupto Francisco Barrio Terrazas y Gustavo Elizondo y Javier Corral Jurado, hay miles y miles de políticos mexicanos ya corrompidos hasta la médula de los huesos, nutridos por mucho tiempo en las negras artes de Maquiavelo y acostumbrados a la práctica habitual de las trampas y la traición sumados al doble juego, habiendo asimilado todas las cochinadas que el PRI tenía que enseñarles para llegar al poder y mantenerse en el poder, seres demeritados incapaces de regenerarse a sí mismos para volver a la honestidad y al camino recto, que no ven para su futuro político inmediato otra salida más que meterse e incrustarse dentro del hoy triunfante MORENA o aliarse con MORENA no por simpatizar con las cuestiones ideológicas de la izquierda mexicana o con las acciones que está emprendiendo el presidente Andrés Manuel López Obrador sino viendo primero que nada por ellos mismos y sus propios mezquinos intereses. Son los tiburones hambrientos que están merodeando alrededor del niño recién nacido al cual el destino (y el largo y arduo trabajo de campaña permanente de López Obrador) le concedió un ascenso meteórico en el panorama político mexicano a partir de 2018, y que por su inexperiencia en asuntos de gobierno se encuentra hoy a merced de los tiburones feroces que nadan en torno suyo y pueden terminar devorándolo si no se pone las pilas y procura la sabiduría y los consejos de la gente sabia que hay en México, que la hay porque afortunadamente no todo está podrido y carcomido como ocurrió con el PAN de la década de los ochentas. La otra alternativa es dejarse corromper y terminar convirtiéndose en aquello que tanto se denunció y contra lo cual se estuvo luchando tan duro por años (algo así como lo que sucedió con Daniel Ortega, el ex combatiente del Frente Sandinista de Liberación Nacional que luchó por mucho tiempo al lado del Comandante Cero Edén Pastora en contra de la dictadura del tirano Anastasio Somoza solo para terminar convirtiéndose en lo mismo contra lo cual se luchaba.)