martes, 24 de julio de 2018

Cómo castiga hoy el nuevo electorado



El nuevo electorado mexicano, nutrido por una nueva generación de millenials que ha aprendido a usar la fuerza de su voto para premiar o castigar a la clase política mexicana, dejó ver dicha fuerza en las elecciones locales y federales de 2018 en las cuales sepultó el bipartidismo PRI-PAN que había encontrado en la tranquilidad de un cómodo amasiato político identificado como PRIAN la fórmula perfecta para estarse repartiendo entre ambos partidos sendas cuotas de poder sin preocuparse por atender realmente las necesidades y exigencias del electorado.

La atractiva mujer de la foto puesta al principio de esta entrada se llama Lilia Guadalupe Merodio Reza, fiel militante del Partido Revolucionario Institucional. Además de contar con una buena presencia física que sin duda alguna le acarreaba algunas simpatías traducidas a votos, ella ya había logrado obtener a través de su partido cargos importantes tales como el de Regidora al Ayuntamiento de Ciudad Juárez (2002-2004), Directora de Recursos Humanos del Ayuntamiento de Ciudad Juárez (2004-2006), y Diputada Federal por el II Distrito Electoral Federal de Chihuahua a la LX Legislatura (2006-2009), inclusive fungiendo como Senadora de la República.

Lilia Merodio no dudó que en 2018, postulada nuevamente por el PRI, podría perpetuar su trapecismo político saltando de un puesto a otro, con la votación expresada en las urnas sirviendo únicamente como mero procedimiento de trámite, para poder brincar inmediatamente de su puesto actual como Senadora e instalarse como Diputada Federal por el Tercer Distrito Electoral (bastión panista desde 1997 con dos períodos intermedios, 2003 y 2015, en los que ganó el PVEM).

Sin embargo, Lilia Merodio tenía una horrible mancha negra pesando sobre sus hombros que ella prefirió ignorar creyendo que los electores harían lo mismo. Resulta que en 2013, acatando la vieja tradición priista del voto por consigna, Lilia Merodio dió su voto en contra de los residentes de la franja fronteriza en el Norte del país, los mismos residentes fronterizos que ella decía representar. Tal y como se lo pidiera el PRI a Lilia Merodio, y el PRI a su vez obedeciendo al pie de la letra los deseos del Señor Presidente de México el priista Enrique Peña Nieto, Lilia Merodio aprobó una cosa llamada “la homologación del IVA” que en Castellano claro era ni más ni menos que la decisión presidencialista de que a todos los residentes de la franja fronteriza se les aumentara el Impuesto al Valor Agregado del 11% al 16%, lo que fue rechazado por un importante sector de la ciudadanía que reclamaron su voto a la Senadora Merodio por diversos medios y atacando sus oficinas de representación en Ciudad Juárez ante una imposición presidencialista impopular y perjudicial para la gran mayoría de los residentes de la franja froneriza.

Una muestra de la ira popular acumulada en contra de Lilia Merodio está documentada en una nota publicada el jueves 31 de octubre de 2013 que bajo el encabezado “Repudian en Facebook a senadora juarense por aumentar IVA” puso lo siguiente:
Luego de que se aprobó la reforma fiscal, en Facebook se creó una página para repudiar principalmente el trabajo de la senadora chihuahuenses Lilia Merodio, así como la de sus colegas Ignacio Duarte, Patricio Martínez y de algunos los diputados federales, como Adriana Fuentes.

Bajo el título “Anti-Lilia Merodio”, la página ya tiene tres mil 678 seguidores. La mayoría de ellos la encara por haber dado su voto a favor del aumento del IVA del 11 al 16 por ciento en la zona fronteriza, incluso la mayoría de los visitantes tachan a los legisladores de traidores, son agresivos e incluso los insultan.

“Que no se le olvide que representa a todo el estado de Chihuahua, no nada más a quienes votaron por usted”, indica un cibernauta luego de que otro usuario subió parte de una conversación en Twitter donde la senadora expresa “… si no votaste por mi no me reclames”.

“Señores diputados y senadores priístas y perredistas que traicionaron al norte de México...les recuerdo las sabias palabras de un Estadista; malditos aquéllos que con palabras defienden al pueblo y con sus hechos la traicionan”, expresó Ramón Murrieta.

“No sea cínica, es triste ver como el poder ensucia a los políticos. ¿Puede dormir tranquila?”, cuestiona otro simpatizante de la página.

“Señora es usted un asco de persona traicionera. Con mi voto no cuente, ni hoy ni nunca”.

“Traidora pero la gente que votaron por los del PRI, se les olvida con su torta y su agua”, indicó Nangie Ishuca.
Lilia Merodio creyó que su voto en contra de los residentes de la franja fronteriza cuyos intereses ella decía representar ante el Congreso de la Unión sería un asunto que pronto quedaría en el olvido, y que en 2018 ella no tendría ningún problema para regresar al Congreso de la Unión, para poder seguirle dando al pueblo puñaladas traperas por la espalda, traicionando a la misma gente que esperaba que hoy votarían por ella.

Se equivocó.

El tiempo de ajuste de cuentas con Lilia Merodio llegaría cinco años después.

Todas las ambiciones y aspiraciones políticas de Lilia Merodio quedaron pulverizadas el domingo 1 de julio de 2018 cuando fue derrotada en las urnas no a manos de algún candidato importante postulado por el Partido Acción Nacional, sino a manos de Claudia Elena Lastra del partido Morena. Lilia Merodio perdió la diputación con el 16.54 por ciento de los votos, frente al 40.30 por ciento que sumaba Claudia Elena Lastra Muñoz. Lo significativo de la derrota de Lilia Merodio es que ocurrió en un estado norteño típicamente conservador, con tendencia hacia la derecha, en donde la izquierda en las elecciones anteriores ni siquiera figuraba como opción viable de alternancia, un estado en donde tradicionalmente el poder se lo disputaban entre el PRI y el PAN. En estas elecciones el PAN quedó relegado prácticamente a un distante tercer lugar.

Lilia Merodio tenía grandes ambiciones políticas con todas las intenciones del mundo de lanzarse en pos de la gubernatura de Chihuahua, quejándose incluso de que estaba siendo bloqueda dentro del PRI en sus intentos por lograr afianzar la nominación para tal candidatura. Pero si en 2018 llevó a su partido a tan apabullante derrota en las urnas no logrando ni siquiera la posibilidad de volver al Congreso como Diputada Federal, ¿con qué cara puede exigir de aquí en delante que se le sirva en charola de plata la candidatura del PRI a la gubernatura de Chihuahua? Los electores ya le manifestaron su rechazo y su repudio a Lilia Merodio sepultando tres metros bajo tierra sus intenciones de convertirse en gobernadora de Chihuahua en caso de ser lanzada en el futuro como candidata del PRI. Y aún si es lanzada como candidata a la gubernatura por algún otro partido, su problema es que por siempre llevará arrastrando con ella el pasado de su vergonzoso voto en contra de los habitantes de la franja fronteriza, oprobio que se suma a su gran derrota en 2018, lo cual es sinónimo de una segura derrota que ningún partido quiere acaparar. ¿Espera realmente Lilia Merodio tener algún futuro político bajo estas condiciones?

Aún más duro debió de haber sido para Lilia Merodio la noticia de que en las nuevas políticas anunciadas el domingo 22 de junio de 2018 por el virtual presidente electo Andrés Manuel López Obrador a través de quien será su Canciller Marcelo Ebrard, estaban una serie de medidas que fueron acordadas para los residentes de la franja fronteriza del Norte de México, incluída la reducción del impuesto del IVA a la mitad, o sea del actual 16% en el que actualmente se encuentra (a lo cual contribuyó con su voto de consigna Lilia Merodio obedeciendo las consignas partidistas del PRI), a un 8% con lo cual el IVA en la franja fronteriza quedaría homologado no con el resto de México sino con el impuesto que se aplica en ciudades fronterizas del lado norteamericano que es de 8.25%, esto además de otra serie de medidas para beneficiar a todos los residentes mexicanos de la franja fronteriza con el vecino país del Norte como la creación de una zona libre tal y como lo había prometido López Obrador en su campaña presidencial, recorrer las aduanas de 20 a 30 kilómetros hacia el sur de la frontera de la frontera Norte, incrementar al doble el salario mínimo en la zona libre de la franja fronteriza, reducir en la zona franca el Impuesto Sobre la Renta al 20%, y modificar impuestos especiales a la producción y servicios para establecer tarifas de gasolina, diesel y gas iguales a las de Estados Unidos. Todas estas acciones, de concretarse, representan un verdadero CAMBIO que necesariamente tendrá que ser contrastado y comparado con la famosa banderita del “cambio” prometido por el Partido Acción Nacional desde los años ochentas para poder llegar al poder y que a fin de cuentas no resultó ser cambio alguno sino un simple “quítate que ai' voy yo”. Todas estas medidas en beneficio de los residentes de la franja fronteriza en la zona norte del país anunciadas por la administración entrante son cosas que el Partido Acción Nacional en su momento pudo haber tratado de hacer cuando tuvo en sus manos la silla presidencial durante dos sexenios, el gris sexenio de Vicente Fox (más de lo mismo, sin cambio alguno) y el trágico y sangriento sexenio negro de Felipe Calderón (cambio para mal, no para bien), pero que no hizo. Y el PRI, en la segunda oportunidad que se le concedió con su regreso a la silla presidencial en 2012, pudo haber tratado de hacer lo mismo o parte de lo mismo que está anunciando la administración lopezobradorista entrante en beneficio de los residentes de la franja fronteriza norte, pero al siguiente año 2013 de haber sido regresado a la silla presidencial en una segunda gran oportunidad, al menos en lo que toca al IVA y recurriendo al voto por consigna de priistas “disciplinados” como Lilia Merodio el PRI con su famosa “homologación del IVA” en la franja fronteriza en vez de tratar de disminuírles el IVA a los fronterizos se los aumentó del 11% al 16%.

Lilia Merodio pudo muy bien haber rechazado la orden de emitir su voto por consigna partidista cuando tuvo la oportunidad para ello recurriendo precisamente el mismo argumento inteligente que está usando Andrés Manuel López Obrador para proponer disminuír el impuesto IVA a la mitad homologándolo con el impuesto que se cobra a las ventas en Estados Unidos. Con un IVA del 16%, los comerciantes mexicanos que residen en la franja fronteriza no están en condiciones de competir en un libre mercado con sus homólogos norteamericanos a los cuales solo se les aplica un impuesto equivalente a la mitad del impuesto que se aplica en México. Pero si ambas tasas impositivas son homologadas, se termina de tajo con la desventaja que los comerciantes mexicanos enfrentaban ante sus homólogos norteamericanos al quedar ambos en igualdad de condiciones, lo cual tendría como efectos positivos una reducción de precios (efecto inmediato) en el lado mexicano beneficiando a todos los consumidores, un aumento en las ventas y el comercio en el lado mexicano, una disminución en la fuga de compradores mexicanos hacia el lado norteamericano, así como atraer más turismo norteamericano hacia el lado mexicano; con lo cual todos en el lado mexicano salen ganando. Pero Lilia Merodio ni siquiera tuvo cerebro para pensar en estas cosas.

Con la disminución anunciada del IVA del 16% al 8% en la franja fronteriza, o sea a la mitad, el partido Morena y el presidente electo López Obrador le han quitado definitivamente para siempre a políticos como Lilia Merodio cualquier oportunidad que hubieran podido tener de poder tratar de corregir su error (o mejor dicho, su traición al electorado). El partido Morena se está encargando de hacer lo que ni el PRI ni el PAN quisieron o pudieron hacer. Y lógicamente, quien tendrá el agradecimiento del pueblo residente en la franja fronteriza por estos verdaderos cambios que sí representan un CAMBIO no serán ni el PRI ni el PAN ni sus partidos satélites como el PRD, el agradecimiento será hacia el partido Morena, un agradecimiento que seguramente se verá reflejado en las urnas en las próximas elecciones que vayan teniendo lugar.

Lilia Merodio no fue el único damnificado político por el tsunami que en 2018 arrasó el mapa electoral de México. También en Chihuahua los electores le cobraron las facturas al gobernador panista Javier Corral quitándole la cómoda mayoría con la cual el PAN controlaba el Congreso del Estado y que le estuvo permitiendo al gobernador Corral incurrir repetidamente en numerosos actos de soberbia, prepotencia y abuso de autoridad despilfarrando a manos llenas el dinero de los chihuahuenses no en obras públicas sino en megapantallas, ceremonias superfluas sin beneficio alguno para los chihuahuenses, propagandas costosas en periódicos oficiales y canales oficiales de televisión para promoción de imagen y culto a la personalidad del gobernador Corral las 24 horas del día, caravanas y actos inútiles de todo tipo fuera del estado de Chihuahua para promoverse como aspirante presidencial. El nuevo Congreso, cuya mayoría estará conformada no por diputados estatales del PAN ni por diputados del PRI sino por diputados de Morena, no parece que tendrá disposición alguna por estarle subvencionando al gastalón Javier Corral sus sus derroches en cultos a la personalidad tapándole además al gobernador Javier Corral sus trapacerías, y antes bien es posible que lo dejarán hundirse por su propio peso sin que Javier Corral pueda contar para su rescate con el apoyo incondicional del Congreso estatal como hasta ahora estaba ocurriendo. Por otro lado, ya se mencionó aquí previamente cómo incluso un viejo cacique del PRI que estaba completamente seguro de que por haber sido gobernador de Chihuahua (2006-2012) sería refrendado tranquilamente en las urnas como Senador de la República (para el período 2018-2024) no solo terminó siendo aplastado en las urnas junto con su gris compañera de fórmula Georgina Zapata Lucero (su único mérito es ser la hija de otro cacique sindical de filiación priista, Doroteo Zapata), recibiendo un voto de repudio de manos de la decisión libre y soberana del pueblo de Chihuahua, sino que también su sola nominación pasando por encima de otros militantes priistas con mucha antiguedad y experiencia dejándose ver muy de la mano con el gobernador panista Javier Corral contribuyó a ocasionar una deserción masiva de las huestes priistas que en buena medida contribuyó a sumir al Partido Revolucionario Institucional en una de sus peores crisis amenazando con la misma superviviencia del partido.

Por todos lados se están viendo las evidencias de cómo el pueblo de México está madurando en este asunto de la democracia y le está dando una bien merecida tunda a los políticos que solo han buscado su propio interés y nunca han estado realmente de lado de las clases trabajadoras de México por las cuales hipócritamente dicen luchar sin tregua. Deberían empezar a entender y aprender que, si tienen aspiraciones de supervivencia política en la nueva democracia mexicana, es mucho más importante votar de acuerdo a la conciencia propia y siempre en beneficio de aquellos a quienes se dice representar que ejercer un voto no-razonado uniéndose a los votos por consigna que a la larga hoy pueden terminar acabando con la carrera política de cualquiera.

¡Ay, Lilia Merodio! Ya no basta con tener una cara bonita para ganar una elección importante. Los electores fronterizos que te repudiaron y te castigaron con un merecido voto de enojo, esos mismos electores que tú ingenuamente (o estúpidamente) creíste que se olvidarían por completo de aquél voto que tú como Diputada federal diste en el Congreso en 2013 para que se ahorcara a todos los residentes de la franja fronteriza subiendo el IVA del 11% al 16%, resultaron ser más listos y menos desmemoriados que tú. Ellos se han encargado de darte una lección que nunca olvidarás. Seguramente no te echarán de menos, pero sí se acordarán de tí en caso de que quieras postularte para ser gobernadora de Chihuahua como en repetidas ocasiones lo has querido hacer, aunque por lo que hoy se ve el PRI ya no te servirá para tales efectos. Lo que tú hiciste en el pasado en contra de los residentes fronterizos no se olvida y no se olvidará jamás. Has aprendido la nueva manera de hacer la política en México. Y más les vale a los demás priistas en lo que queda del PRI aprender y adaptarse a la nueva realidad; o enfrentar la extinción del que en sus tiempos de gloria fuera la aplanadora invencible acostumbrada a llevarse el “carro completo” en las elecciones. No más.

1 comentario:

zenaida ceniceros dijo...

la señora merodio mejor deberia buscarse a alguien que la mantenga y la saque de trabajar, y si no tiene algun prospecto que cumpla con sus requerimientos pues que se busque un trabajo en una guarderia o en una tortilleria ganando el minimo pa que vea lo que se siente