Amor es compartir. Así reza un popular refrán.
Como yo no soy multimillonario, no tengo mucho dinero para repartir y ayudar a quienes más necesitan este tipo de ayuda. :(
Pero en el transcurso de mi vida he acumulado una cantidad razonable de conocimientos que no me quiero llevar conmigo al más allá en donde no le servirían a nadie en el más aquí. Esta es una de las principales motivaciones por las cuales he elaborado varios trabajos como Fundamentos de Lógica Digital, La Teoría de la Relatividad, La Mecánica Cuántica, El Ajuste de Datos a Fórmulas, Initial Conditions, Los virus informáticos, Geometrías no-Euclideanas, y continúo trabajando en otros trabajos nuevos mientras pueda hacerlo así como tratar de concluír aquellos que han sido empezados y que aún no han sido concluídos, para compartirlos gratuitamente con otros sin esperar algo a cambio excepto tener la esperanza de que puedan serles de ayuda a muchos en sus estudios o que puedan servir como fuente de referencia para quienes están interesados en los temas sobre los cuales escribo. ;-) Afortunadamente, la red mundial Internet me permite ver que dichos trabajos puedan estar disponibles y accesibles sin costo alguno a cualquier hora del día. La Web también me ha permitido compartir una parte de la música que he compuesto en mis tiempos de ocio, con piezas como el Villancico de Belén, Vals Intermezzo, la Marcha Chihuahuense, Heroica, La Tempestad, etc.
Un resultado sumamente grato del haber estado compartiendo mis conocimientos y mis trabajos científicos y musicales con otros que no tengo el gusto de conocer en persona son las muchas muestras de agradecimiento y felicitaciones inmerecidas que he estado recibiendo de todas partes del mundo por la ayuda que les he proporcionado a mis lectores con los materiales que he desarrollado para ellos. Pese a que esto me ha generado unos enormes volúmenes de correo que he estado recibiendo, cientos y cientos de correos electrónicos para los cuales no me alcanza el tiempo para acusar recibo y contestarlos todos sin un retraso que a veces dura días, semanas, o inclusive meses, de alguna manera trato de darle seguimiento a mis amigos que he estado formando alrededor del mundo. No dudo de que tal vez algún día en el futuro llegará el momento en que mis lectores y seguidores lleguen a la cifra mágica de un millón, y cuando eso ocurra se hará realidad el sueño que el famoso cantante brasileño Roberto Carlos plasmó en una canción igualmente famosa, “Un millón de amigos” (Um milhao de amigos). Creo que muchos hispanoparlantes ya han escuchado alguna vez en su vida la música de dicha canción. Pero tal vez la letra la hayan olvidado. Con la finalidad de que puedan rememorar esa hermosa pieza y cantarla con su letra original en Español, reproduzco aquí la letra deseando sinceramente que dicha composición lleve a muchos paz interior, tranquilidad espiritual, o inclusive consuelo en caso de necesitarlo en los momentos duros de la vida.
Un millón de amigos
Roberto Carlos
Yo solo quiero mirar los campos,
yo solo quiero cantar mi canto,
pero no quiero cantar solito,
yo quiero un coro de pajaritos,
quiero llevar este canto amigo
a quien lo pudiera necesitar.
Yo quiero tener un millón de amigos,
y así más fuerte poder cantar.
(se repite)
Yo solo quiero un viento fuerte,
llevar mi barco con rumbo Norte,
y en el trayecto voy a pescar,
para dividir luego al arribar.
Quiero llevar este canto amigo
a quien lo pudiera necesitar.
Yo quiero tener un millón de amigos,
y así más fuerte poder cantar.
(se repite)
Yo quiero creer la paz del futuro,
quiero tener un hogar sin muro,
quiero a mi hijo pisando firme,
cantando alto, sonriendo libre.
Quiero llevar este canto amigo
a quien lo pudiera necesitar.
Yo quiero tener un millón de amigos,
y así más fuerte poder cantar.
(se repite)
Yo quiero amor siempre en esta vida,
sentir calor de una mano amiga,
quiero a mi hermano sonrisa al viento,
verlo llorar pero de contento.
Quiero llevar este canto amigo
a quien lo pudiera necesitar.
Yo quiero tener un millón de amigos,
y así más fuerte poder cantar.
(se repite)
Venga conmigo a ver los campos,
cante conmigo también mi llanto,
pero no quiero cantar solito,
yo quiero un coro de pajaritos.
Quiero llevar este canto amigo
a quien lo pudiera necesitar.
Yo quiero tener un millón de amigos,
y así más fuerte poder cantar.
(se repite varias veces)
¿Quién, teniendo un millón de amigos, no puede sentirse muy afortunado, y mucho más rico que cualquier millonario?