Faltando tres días para que termine el 2019, apareció publicada en el periódico local la siguiente noticia que debería preocupar a todo ciudadano estadounidense:
Rusia dice tener lista nueva arma hipersónica
Fuerzas rusas aseveran que el llamado Avangard es capaz de volar 27 veces la velocidad del sonido
EL DIARIO
Viernes, 27 de Diciembre de 2019
Rusia ya tiene listo un nuevo sistema bélico hipersónico, después de someterlo a varios años de pruebas, informó el viernes el Ministerio de Defensa ruso. Las fuerzas rusas aseveran que el llamado Avangard es capaz de volar 27 veces la velocidad del sonido.
El ministro de defensa le reportó al presidente Vladimir Putin que el primer sistema de navegación hipersónica Avangard adosado a un misil está en condiciones de combate.
Putin develó el Avangard junto con otros planes armamentistas en su discurso de estado de la nación en marzo de 2018, asegurando que será impenetrable a las defensas antimisiles porque es capaz de maniobrar súbitamente a grandes velocidades.
El líder ruso describió la creación del Avangard como un hito histórico comparable al lanzamiento del primer satélite soviético en 1957.
A inicios de esta semana, Putin señaló que Rusia es el único país con armas hipersónicas y que por primera vez en la historia Rusia está a la vanguardia mundial del desarrollo de un nuevo tipo de armas, a diferencia del pasado, cuando estaba eternamente rezagado con respecto a Estados Unidos.
La prensa local reportó que el Avangard será montado inicialmente en misiles balísticos intercontinentales RS-18B, apodados SS-19 por la OTAN. Eventualmente será acoplado al misil balístico intercontinental Sarmat.
El Ministerio de Defensa ruso anunció el mes pasado que demostró el Avangard a un equipo de inspectores estadounidenses como parte de una iniciativa de transparencia relacionada al nuevo acuerdo Start.
Estados Unidos está analizando estrategias defensivas ante el surgimiento de armas hipersónicas por parte de Rusia y China.
Funcionarios estadounidenses han considerado la posibilidad de colocar sensores adicionales en el espacio para detectar misiles más rápidamente. Otra posibilidad es desplegar sensores en el espacio de manera de que se puedan interceptar los misiles tan pronto sean lanzados.
El Pentágono también ha estado desarrollando armas hipersónicas y el secretario de Defensa Mark Esper pronosticó en agosto que probablemente en dos años Estados Unidos tendrá el suyo propio.
El proyectil Avangard tiene todas las características del misil de crucero que no solo es capaz de poder volar a baja altura evadiendo la detección del radar y puede ir cambiando su dirección afinando su puntería sino que además incorpora una enorme velocidad de vuelo que no es igualada por nada que EE.UU. tenga en estos momentos en su arsenal militar.
Lo importante de la noticia es que no se trata simplemente del anuncio de un arma experimental que ya pasó exitosamente las pruebas de campo para poder ser utilizada en caso de una guerra. Se trata de un arma que ya ha sido desplegada en uso activo y se encuentra en servicio lista para ser usada en un enfrentamiento militar.
Estados Unidos no tiene absolutamente nada en su arsenal militar capaz de poder neutralizar la capacidad hipersónica de los proyectiles hipersónicos Avangard. Si en estos momentos estallara un conflicto bélico entre Rusia y Estados Unidos, el proyectil hipersónico Avangard puede ser el arma que le daría a Rusia la superioridad militar en el campo de batalla permitiéndole derrotar y humillar a Estados Unidos.
El ataque a las Torres Gemelas de Nueva York llevado a cabo hace 18 años el 11 de Septiembre de 2001, puso al descubierto la gran vulnerabilidad de Estados Unidos frente a pequeños grupos terroristas decididos a todo, y sepultó el mito de la invulnerabilidad y supuesta invincibildad de EE.UU. considerado todavía hasta entonces como la potencia militar más poderosa de la Tierra.
En el declive de la incuestionable supremacía militar norteamericana podemos suponer que mucho ayudó a los países que hoy están alcanzando a Estados Unidos el que la política migratoria diera cada vez más preferencia a individuos casados con ciudadanos norteamericanos y a hijos de ciudadanos norteamericanos sin tomar en cuenta para nada los méritos académicos de tales individuos. Sin un sistema migratorio basado en el mérito, dando preferencia a los poseedores de un título universitario sobre todo en las áreas científicas y tecnológicas, no había ningún incentivo (invitación) para alentar la inmigración de profesionistas que ni estaban casados con ciudadanos norteamericanos y que tampoco fueran hijos de ciudadanos norteamericanos, tales individuos se resignaron a quedarse en sus respectivos países. El Congreso norteamericano no ha corregido esto, y cualquier corrección que aplique llega ya demasiado tarde.
Pero no solo la hegemonía militar estadounidense parece haber llegado a su fin. China se está consolidando como la primera potencia económica mundial. Esta es la razón del por qué cuando el presidente Donald Trump amenazó a China con desencadenar una guerra comercial que el iluso Trump dijo que sería "fácil de ganar". Donald Trump tuvo que recular y dar marcha atrás, humillándose a sí mismo y con ello humillando a su país, al tener que resignarse a aceptar condiciones que le eran impuestas por China para alivar las represalias económicas tomadas por China en respuesta a las arbitrarias tarifas arancelarias impuestas por Donald Trump al gigante asiático.
En otros tiempos recientes, el gran anhelo de Estados Unidos era la aniquilación del comunismo. Pero el comunismo se aniquiló a sí mismo al quedar expuesto como una doctrina económica inviable incapaz de poder cumplir a la larga las expectativas que generaba. No había un "enemigo" en contra del cual combatir, y los terroristas musulmanes nunca han sido razón para aumentar las inversiones en los campos científicos y tecnológicos. Lejos había quedado el país que tiempo atrás había alentado en la Operación Clip de Papel la inmigración legal en masa de científicos nazis expertos en cohetería (empezando con Wernher von Braun) que ni eran hijos de ciudadanos estadounidenses ni estaban casados con ciudadanos norteamericanos pero que le dieron a Estados Unido el liderazgo mundial en proyectos espaciales. Hoy queda muy poco o casi nada de eso. Este viraje en políticas migratorias le tienen que agradecer mucho a Estados Unidos países como Corea del Sur, Japón, Rusia y China, que dejaron de perder a sus científicos más talentosos en el fenómeno conocido como fuga de cerebros motivado por el espejismo del dólar.
En resumen, se están confirmando los signos evidentes de que EE.UU. ha dejado ya de ser el número uno en todo a nivel mundial. Es posible que estemos viendo el cumplimiento de profecías de corte bíblico que desde hace miles de años anticiparon que tal cosa sucedería. Y si es así, entonces nada que haga Estados Unidos podrá detener o tan siquiera amortiguar el fin de su hegemonía que antes en otras épocas podía poner al mundo entero a temblar.
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