martes, 27 de marzo de 2018

Cómo encontrar mis composiciones en YouTube

He estado subiendo varias composiciones musicales mías a YouTube, algunas elaboradas en lo que viene siendo el equivalente de música orquestal sinfónica, y algunos de mis lectores me han comentado que aunque es posible localizar mis obras musicales con la ayuda de Google, el asunto se vuelve mucho más complicado tratando de hacerlo desde el mismo YouTube al grado de ser prácticamente imposible.

YouTube proporciona su propia herramienta de búsqueda en la esquina superior izquierda:


Si se intenta localizarme en la maquinaria de búsqueda de YouTube simplemente poniendo mi nombre:


entonces la dificultad para encontrarme seguramente se debe a que en la lista de los mas de 116 mil resultados (al final de marzo de 2018) que YouTube proporciona sobre los resultados de la búsqueda pedida, los resultados que aparecerán en los primeros lugares no son de obras mías sino de homónimos míos que también se llaman Armando Martínez, siendo varios de ellos intérpretes o compositores de la popular música de banda grupera del Norte o de tendencias off beat como Metallica, Hip Hop y Rap, la mayoría de los cuales tienen mucho más tiempo que yo subiendo sus materiales a YouTube (a veces varios años habiendo acumulado ya en todo ese tiempo miles y miles de visitas), y por lo tanto cualquiera de ellos tendrá muchas visitas que las visitas que mis obras han acumulado en los menos de 2 meses que he estado subiendo mis contribuciones a YouTube, y como muchos deben estar enterados, los listados son proporocionados por YouTube en base al número de visitas acumuladas, lo cual seguramente me pone en los últimos lugares entre los más de 116 mil resultados proporcionados por el motor de búsqueda de YouTube.

Además de la posibilidad de recurrir directamente al motor de búsqueda de Google en vez de hacerlo a través de  YouTube, en YouTube resulta mucho más fácil encontrarme si en vez de mi nombre se pone el título de alguna obra de autoría mía con la cual esté siendo buscado; por ejemplo el Vals Intermezzo:


con el cual aparezco (o mejor dicho, aparece la obra) entre los primeros lugares de las listas de popularidad ayudado por el hecho de que mis composiciones musicales se basan en otro tipo de música que ciertamente no es el estilo de las bandas gruperas o de aquellos que se dedican al Rap o al Hip-Hop o a la música de Heavy Metal, de forma tal que el tipo de música que estoy elaborando es un estilo de música instrumental que puede ser usada para descansar, meditar y reflexionar al escucharla, o inclusive ponerse romántico, no para poner todo el cuerpo en movimiento sino para mover el alma, una música fuera del ámbito del tipo de música en la que están especializados todos aquellos homónimos míos que también se llaman Armando Martínez.

Aprovecho la oportunidad para recalcar que los materiales a los que estoy haciendo referencia aquí son materiales en mi faceta como compositor de obras musicales. Tengo otras facetas, desde luego, siendo una de ellas la de ser autor de obras de carácter científico que han sido publicadas en Internet, como La Mecánica Cuántica, un tema en el cual con el debido respeto a los cantautores y creadores de música de banda, música rapera y otros estilos populares de actualidad, no creo que representen mucha competencia para mí. Si cualquiera de ellos dice ser yo, pues sería cuestión de ponerle uno de los cientos de problemas de Mecánica Cuántica cuya solución completa he proporcionado en la obra referida, y si se les ponen los ojos cuadrados sin decir ni pío, entonces se puede tener la seguridad de que aquellos que afirman ser yo no lo son.

1 comentario:

Unknown dijo...

Señor Armando Martínez: Encontré sus textos sobre física esta semana y prácticamente los he devorado. Alguna vez estudié mecánica cuántica en libros como Fynn, las lecturas de Feynman, Eisberg, Messiah o el de Dirac, y lo intenté hasta con algún ruso pedante e ilegible, sin sacar demasiado provecho, y estoy muy impresionado con su claridad didáctica y rigor conceptual. Una exposición perfecta de la esencia conceptual de esta ciencia para intelectuales no incompetentes en matemáticas. Desde hace años echaba de menos en internet una exposición razonablemente clara y rigurosa de la mecánica matricial de Heisenberg. No entiendo cómo el sabelotodo Google tardó varios años en conducirme a su trabajo. Deseo manifestarle mi agradecimiento y admiración por tan excelente labor. Su generosidad realmente resulta abrumadora, porque es evidente que la dedicación ha debido ser enorme. Tiene usted toda mi admiración, no sólo como competente intelectual y hombre culto sino como el gran ser humano que se percibe detrás de cada una de sus líneas. Sepa que su trabajo da frutos y realmente, tal como usted lo intuía, viene a llenar un hueco inmenso en la literatura "dura" de divulgación científica en el mundo hispanohablante. (Es más: creo que es un libro de texto que fácilmente sustituiría con éxito algunos de los que le mencioné -y otros- como curso introductorio universitario). Que Dios lo bendiga.